Dependiendo del tipo de web que tengas, o desees tener, debes escoger un tipo de hosting u otro. No es lo mismo tener una tienda online en contínuo crecimiento que una página con miles de vídeos. Todo ello afecta a la hora de elegir hosting.
Normalmente todo el mundo empieza con un hosting compartido. Son baratos, tienen un rendimiento aceptable cuando nuestra web aún no es demasiado grande ni recibe muchas visitas y tienen un precio asequible.
El problema está cuando la página empieza a recibir mucho tráfico. En ese momento, es posible que la página sufra ralentizaciones, falta de espacio en disco o incluso ataques ddos si se hace muy popular.
Por todo ello se hace necesario elegir bien el hosting que vamos a usar, atendiendo a una serie de parámetros básicos.
¿Qué tipo de página vas a crear?
Tener claro qué tipo de página vas a crear, es algo esencial a la hora de elegir hosting. No es lo mismo crear una página por diversión que por necesidad o negocio.
Dentro de éstas últimas pueden incluirse webs de empresa, tiendas online o webs que te hagan ganar dinero, como webs de afiliación.
Por poner un ejemplo rápido, podrías tener una una tienda online que requiera una IP dedicada y un certificado SSL. O un sistema de administración que te permita seguir la pista a tus clientes, ver cuáles han comprado algo, etc.
No todos los hosting ofrecen certificados SSL en sus planes de alojamiento. Por eso debes tener claro qué página vas a crear y cuales son los requisitos para la misma y en función de eso, elegir el hosting que mejor se adapte a tus necesidades y a tu bolsillo.
Escalabilidad
Tener un hosting que crece a medida que lo necesitas es esencial, en especial si tienes una tienda online o cualquier otra página con un tráfico cada vez mayor.
Normalmente, la mayoría de los hosting que merecen la pena, como los que puedes encontrar en los análisis de nuestra página, disponen de medios para actualizar en tiempo real tu plan de alojamiento sin que tengas que hacer nada… excepto pagar.
El hosting compartido es una buena solución para páginas estáticas, o páginas dinámicas hechas con WordPress, Prestashop, etc siempre y cuando el tráfico de las mismas no sea excesivo.
El rendimiento de los hosting compartidos es el peor de todos sobre todo si la carga de trabajo es elevada, y no es recomendable mantenerlo por más tiempo del necesario, sobre todo si tus visitas suben como la espuma.
Los VPS son el término medio entre el compartido y el servidor dedicado. A pesar de que tu web estará alojada junto a otras, el rendimiento es más elevado que con un hosting compartido y te permite mayores opciones de configuración, tanto a nivel de seguridad como del propio servidor.
Los servidores dedicados están únicamente destinados a usuarios avanzados, con unas necesidades altas de espacio en disco, tráfico y velocidad. No es una opción barata, es la mejor.
Los planes de hosting ilimitados no lo son
Los planes ilimitados de hosting compartido son algo bastante común hoy día. Normalmente las empresas tienen en cuenta que las páginas, sobre todo al principio de su vida, no van a tener mayores necesidades, pero ten por seguro que tu proveedor de hositng se pondrá en contacto contigo si tu cuenta de hosting gratuito empieza a recibir más tráfico del considerado normal.
Los proveedores de hosting usan la palabra «ilimitado» demasiado a la ligera, así que tenlo en cuenta si la cosa crece más de lo esperado.
El soporte técnico es importante
Muchas empresas ofrecen soporte 24/7 los 365 días del año. Las formas de contacto suelen ser a través de teléfono, chat o los habituales sistemas de tickets.
Normalmente con el hosting compartido no suele haber problemas, ya que es menos configurable y hay menos oportunidades para el error que en un VPS o Dedicado. Si te decides por uno de éstos últimos, asegurate de que la empresa de hosting que contratas, tiene buena reputación en lo que a soporte al usuario se refiere.
Resumiendo
Cuando tengas dudas sobre que hosting comprar, elige uno pequeño antes que uno grande. Si resulta que se te queda pequeño, siempre podrás actualizarlo y algo habrás ahorrado en el camino. La migración entre distintos planes de un mismo tipo de hosting suele hacerse rápidamente y sin tiempo de espera para el usuario.
Normalmente el problema viene cuando quieres pasar de compartido a VPS o dedicado. En ese caso si que pueden presentarse algunas pequeñas complicaciones o un mayor tiempo de espera para el usuario ( siempre que no haga la migración él mismo ), pero para pasar de un plan de hosting compartido a otro un poco más potente, no hay ningún problema.